CAÍDO

Eres ángel caído de un cielo que nunca fue tuyo.

He cargado con tu dolor, en mi dolor la sombra de tu amor.

Penitencia agónica que nace en un sepulcro donde aun duermes.

Tu desaire me viste de cilicio, mi corazón se vierte en congoja.

El ocaso sin horizonte adorna de penumbra, la blanca arena que en la rivera descansa.

Mientras construyes castillos de arena y sal.

En sus ventanas encallado lagrimas de sangre, arrecife de cristal.

Ahora se lo que se sufre por amor.

No se si estoy libre de culpa o soy culpable al codiciar el azufre de tus besos.

Nada se compara a este ímpetu de sentirte como antes.

Las horas no me alcanzan para pensarte ni la vida misma para amarte.

Pero en este mundo imparcial que hemos creado solo existe un cielo.

Ángel caído, ángel perdido, ángel occiso...

ENTRE LOS DEDOS

Dos vidas encontradas en circunstancias tan autenticas.
Pasaron las horas y nuestro tiempo estático.
Nuestro amor mustio como las flores amarillas.
Lapso que parece eterno y ahora un minuto bastaría para estar en tus brazos.
Tu te haz convertido en algo inalcanzable, tanto y tan poco nos separa.
El deseo de verte ya parece obsesión aun al saber que eres el reflejo mágico de una ilusión.
Cierro los ojos y ardiente de sensaciones siento tu cuerpo, tu alma desnuda.
Tus besos, manchas de rioja en mis labios.
Tus manos junto a las mías se hacen densas en ellas hay urgencia.
Arrecha por sentirte irrumpir mi triangulo de labios.
Yo se que escuchas mi voz.

¿ALGUNA VEZ HAZ ENCONTRADO ALGO? ¿ALGUNA VEZ HAZ PERDIDO ALGO?

Tu constante intento de olvido te recuerda que de tan solo pensarme tiemblas.

Llevas tallado mi cuerpo en tus manos y tus caricias hablan de mi.

En tus labios la humedad de los míos cuando sueñas que te beso.
¿Alguna vez haz encontrado algo?

¿Alguna vez haz perdido algo?
Entre el cielo y el infierno existe nuestro Universo.

Entre la locura y la cordura.

Tu donaire lleno de candor se desplaza sobre mi piel, arde, quema...

La vida es, amanecer escuchando tu voz pronunciar mi nombre.

Sentir lo exquisito de las inervaciones de tu aura invadirme.
¿Alguna vez haz encontrado algo?

¿Alguna vez haz perdido algo?
Un hechizo habitar en tu presencia,

mientras la idea de tu amor me embriaga.

Tu gallardía, alarde que exhibes prendado en tu ademán.

Como llevas prendado mi amor.
Que cada uno de esos besos soñados nos salve de olvidar lo vivido.

Aunque esta desdicha nace de aquella mañana llena de penumbras.

Se ilumina mi vida cuando vivo colgada de tu sonrisa.

Se expande mi pecho al sentir cóncava las suaves hondonadas de tu cuerpo.

En la soledad de mi cama sobre estas sabanas que transpiran tu perfume, te deseo.

Mi cuerpo que es ávido refugio de tus besos, padece por ti.

¿Alguna vez haz encontrado algo?

Si..

¿Alguna vez haz perdido algo?

A ti...

ME SOSTIENES

Tus brazos me sostienen para así disfrutar el viaje entre las densas nubes.

Bajo la sombra de una luz negra,

una lluvia de estrellas te viste de colores.

Porque tu cuerpo es lienzo donde mis pinceles pierden su color.

La carne llama, un rugir pantera...

Besos, mordidas y tu lengua como látigo y con mi castigo flagelas.

Laberinto sin salida,

el miedo se convierte en amor.

Ese "Rush" del éxtasis sublime al sentirte...

Como esa constante,

ronca y honda voz que de lo profundo nace.

Te desconcierta, te acelera,

te hace vibrar, sensación que aprendiste conmigo.

Trazando surcos en tu alma,

destellos de caricias encontradas.

Momentos que de ti no puedes borrar.

Prendar tu boca de besos...

Pasión indeleble.

ME HACES LA BOCA AGUA

Manantial de agua fresca son tus besos que con mi mente acaban.

Tu reflejo intacto, tu mirar de lunar sobre ceja que cautiva el ser.

Atrapada en la demencia de tus besos casi desmayada sobre tu pecho desnudo.

Abrazada a tu espalda tus caderas cortantes carvan mi cintura.

Haciendo de esta velada un encuentro en donde me desbordo como lava sobre un mástil.

Con tu lúcuma lubricas estos labios partidos que tienen sed de ti.

Con la mirada fija en tu rostro, controlando el vaivén de tus caderas que con desvergüenza atraganta mi garganta.

Mis cabellos te sostienen indefenso ante el desfallecimiento de tus piernas.

¡Oh! Que ganas de que me hagas la boca agua.

IDILIO

El pasado entorna como reclamo mudo a tu conciencia.
Esas melodías que tanto escuchas,
mi verdad, relato en canción.
¿Por que la dedicas a otra?

La que vive en tu memoria soy yo.
Como puñal hiere mi costado,
delirio que sobrepasa la perdida de razón.

Inconciente tendida,
ráfagas frías, esa soy yo.
Tu bebiendo de un río sin cause,
mi sed se sacia en el fondo de tus labios.

Mientras mi sangre al fluir va cantando tu nombre,
la brisa de la noche lo repite al pasar.
Eres como una cicatriz,
sanas pero nunca desapareces.

Caricias ausentes tatuadas en mi cuerpo.
Perpetua condena tu piel en mi piel.
Entre la bruma de este crepúsculo cobras vida.


Dibujando siluetas con manos ligeras,
inexpertas como el repique latente de tu lengua.
En tu pecho quiero jadeante recorer cada linea, cada espacio.
Pentagrama donde solo mi música vive anclada.

Quiero ahogarme en tus besos,
hundirme en tu piel.
Báñame de tu sudor sangre,
agua del infierno de tu cuerpo quiero beber.

Devórame con tu boca y respira mi aliento.
Encadéname en tu atrio,
enreda tus dedos en mi cabello.
Pídeme que con mis labios roce tu entrepierna y
que con mi lengua teja un macramé.

En el arco de tu espalda dejo huellas.
En mi boca dejas sabor a ti,
en las manos humedad.
En mi cuerpo el deseo insaciable de sentirte.

NO TE OLVIDO

Caminando en alfombra de hojas secas entre gigantes que no dan sombra.
Terrenos secos, sillas de piedra y un silencio abismal.
El corazón palpita al ritmo de tus pasos que en mis pisadas van.
Si, en esas veredas donde la brisa es tan frívolo como tu amor.

Trofeo de guerra, tu dulce venganza y nada mas.
Palabras silenciosas, notas al azar escritas en pergaminos de arena.
Vulnerable entre la ilusión y el desengaño.
Presa sin amparo la carnada tus encantos.

Aquel revoloteo me detuvo un momento pero tenia sed, hambre de ti.
Me acogisteis en tu seno de tus manos solo migajas nunca suficientes.
Arrebataste con tu desvanecer el fulgor de mis amaneceres.
Manos de seda caricias aterciopeladas que aun desgarran mi piel.

Tu ladrón de corazones que bajo mentiras te adueñaste de mi amor.
Me haz arrancado la vida apoderándote de mi alma.
Alquimista que de ajuar llevas versos para enamorar.
Busco el olor de tu piel queriendo sentir el calor de tu cuerpo, tu lento respirar.

Con voz doliente y trémulo acento se escapa de mis labios tu nombre.
Y como un "Slideshow" se cuela tu semblante,
tu mirar profundo,
tu voz serena.

Con el sentimiento quebrantado por tu desvanecer,
mi lamento se difunde en un quejido agudo,
disfrutando cada movimiento y te siento.
Nuestras siluetas danzan en un espacio detenido en el tiempo.

En esta ocasión el vulnerable tu necesitado de mis caricias,
mis besos cargados de pasión que ya no susurran tu nombre.
Eras un vago recuerdo enredado en mi memoria,
un fantasma rasgando entre mis velos.

Falto de palabras sin valor para dar explicaciones como Cóndor desenfrenado partiste a otro cielo.
Tus coordenadas ya trazadas con destino asegurado han de haber fallado…

Al pasar de los años el timbre suena.
Para mi asombro tu a la puerta cruel descaro, una vez mas falto de palabras sin explicaciones.
Why do you come here?

Este siempre un lugar calido, ahora lugar equivocado.
Ahogado en sentimientos y ese amor efímero que te consume.
Navegando en esa esfera en un navío sin horizonte.
Destino asegurado, naufragio sin nombre.